Hasam Malfoy Ragnarok
<<-Ok, ahora si se le ha ido la olla a mi hija>> -pensó el Malfoy al escuchar las palabras de @ Ada Camille Dumbledore , aquello seguramente era una broma, aunque una muy pesada. Al vampiro no le quedo mas que ver a Selene intentando saber que pensaba ella o mas bien, quería ver su reacción, si acaso ella pensaba como él que aquel juego había llegado muy lejos. Respiro profundamente, aunque sonrió al escuchar como @ Saori Rambaldi Ragnarok le daba la razón en aquel pensamiento que había tenido - muy graciosa hija -dijo el Malfoy- pero si quieres una hermana podrías pedirle a tu madre que deje de huir.
La Dumbledore volvió a hablar y esta vez revelo un nombre, el nombra de la madre de Saori. Pensó un poco pero aquel nombre no le decía nada. bebió un trago de su bebida. Quizás lo mejor era irse de allí, Ada no podía ponerse a jugar con algo tan serio como aquello, mas, sabiendo lo mucho que él amaba a su madre y que seria incapaz de engañarla con alguien mas. El tío del Ragnarok estaba a punto de levantase cuando sintió el ligero apretón de la mano de Selene, quizás, pidiéndole que se quedara unos minutos mas, ya que si Ada estaba destapando aquella olla de poción tan explosiva era por algo. Al viejo Malfoy no le quedo otra que quedarse
-No recuerdo a nadie con ese nombre -dijo sin mas de manera seria- aunque... -Hasam pidió un segundo levantando un dedo y saco un pequeño espejo de doble cara. No era normal que utilizara aquel objeto a menos que fuera muy importante o una emergencia- Hades -susurró. Un segundo después los ojos negros de su sobrino aparecieron en aquel espejo.
-Que paso?, estas bien?, están bien? -pregunto el ragnarok preocupado- que sucede?
El Malfoy le pidió calma.
-Sobrino, conoces o has oído mencionar a una tal ... Reiko Yoshida? -pregunto el Malfoy Ragnarok.
El ragnarok guardo silencio un segundo y con mirada triste observo a su tío.
-No la recuerdas cierto? -dijo el Ragnarok- obviamente no -negó con la cabeza- solo diré una frase Mitsuha de Sakura
El ragnarok se despidió de su tío. sabia perfectamente que al escuchar aquella frase, todo quedaría claro para el.
El Malfoy se quedo observando el espejo por unos segundos que parecieron horas. levanto la vista y observo los ojos de Selene, para luego observar a Saori, a su prometida @ Rose Black Lestrange y a su hija Ada. No, aquello no era posible y sin embargo... maldijo por lo bajo, por una razón había olvidado aquel nombre. El Malfoy le había pedido a Hades que le borrara la memoria, sin embargo, el cainita había colocado de alguna forma gracias a un antiguo encantamiento descubierto por el Ragnarok una palabra detonante para el recuerdo.
-No es una broma -observo a los presentes- ya recordé quien es Reiko Yoshida -dijo suspirando tristemente- lo siento mucho -dijo el vampiro levantándose, pero no para irse, se acerco a Saori y la estudio con la mirada, se metió en su mente y observó la imagen de la japonesa, tenían los mismos ojos Saori y ella- supongo que les gustara escuchar una historia.... una que sucedió hace mucho mucho tiempo, antes de que si quiera yo conociera a Selene
-Como alguna de ustedes saben, Hades heredo un templo que se encuentra entre el Monte Fuji y el Kita-dake, su maestra había muerto por lo que el era quien se encargo de aquel lugar, pasaron los años y vino a Londres donde paso toda la historia de la familia, sin embargo, hades recibió un llamado urgente, una antigua criatura estaba azotando y asolando el lugar, hubo muchos muertos, la masacre era inmensa y si él no hacia algo... bueno ya se lo imaginaran -el Malfoy bebió algo y continuó- el problema radica en que él no podía viajar hasta Japón, por lo que yo le pedí que me permitiera ir por el, aunque arregañadiente acepto, era una misión muy arriesgada, de vida o muerte, bueno, mas muerte que vida, la verdad es que quería conocer el lugar y era una excusa perfecta para ello y claro estaba, estaba aburrido aquí encerrado -comento en tono tranquilo aun sabiendo que no había llegado a la parte que le interesaba a todas.
El Malfoy Ragnarok volvió a su puesto y se sentó mirando a algún punto lejano...
-Cuando llegue no se pueden imaginar el caos y destrucción que había, todo estaba lleno de sangre, casi ninguna estructura se encontraba en pie, solo el templo que estaba protegido por una magia ancestral fue lo suficientemente fuerte como para resistir el ataque de aquella bestia, podría decir que tendría pesadillas con eso si no fuera por el hecho de que no puedo dormir y obviamente me había obligado a recordarlo hasta ahora -suspiro- seguí un rastro de sangre que se adentraba hasta dentro del templo y allí la encontré, casi muerta, muy herida y respirando de manera muy lenta, una joven bajo un árbol de Sakura o cerezo, en su pecho desgarrado solo habían tres pétalos... Mitsuha de Sakura -el vampiro susurro eso ultimo- la atendí lo mejor que pude, Hades me había enseñado lo suficiente como para saber lo que debía hacer, además, por suerte, iba a preparado con pociones, ungüentos y demás cosas -dibujo una mueca- Hades jamás me hubiera perdonado si no llevara un Kit como aquel siendo el Director de san Mungo, supongo que eso lo sabes muy bien -dijo observando a Ada para luego mirar a Selene y a las demás- cuide a la joven lo mejor que pude, trate todas sus heridas, hasta el punto que no debía haberle quedado ninguna cicatriz visible, solo que no conté con que aquella criatura era muy diferente a las demás, por lo que el daño causado era mucho mas de lo que yo pudiera controlar y prever
El Malfoy cerro los ojos recordando, después de todo, a cada palabra se le iban sumando mas imágenes en su mente.
-Pasaron no mas de 2 días y una noche de luna llena encontré al fin a la criatura, luchamos, era muy ágil, resistente y poderosa, debo decir que estuve a poco de morir, sin embargo, quizás los dioses estaban de mi lado aquella vez por lo que logre matarla, sin embargo, no conté con que aquella criatura había causado un daño superior a la chica quien después de parecer que se estaba recuperando comenzó a empeorar -siguió contando- según me dijo hades, las heridas causadas estaban malditas, por lo que aunque hubiera curado su cuerpo, superficial, aquello era mucho peor, no había otra cosa mas que llevarla a verlo, solo que, no podía utilizar un traslador, ella no hubiera soportado aquello y no había red flu, la solución lógica si no quería que la chica muriera fue un largo viaje hasta Londres, hades no podía venir en nuestro auxilio
El tío del Ragnarok observó a Saori a los ojos.
-Pensé que Reiko se moría en mis brazos muchas veces, cada día que pasaba empeoraba, hablábamos poco, no quería que se debilitará mas de la cuenta, pero si me conto que jamás había salido de Japón, que había crecido en aquella villa destruida por la criatura y que no sabia como había llegado hasta el templo -el Malfoy volvió a ver a Selene esperando ver en su mirada algún tipo de reacción, tristeza, decepción, asco, cualquier cosa- cuando llegamos Hades nos estaba esperando, nos habíamos comunicado por nuestros espejos de doble cara, a la final, la atendió y logro salvarla, después de curarse pasamos mucho tiempo juntos, solo que ambos sabíamos que tendríamos que separarnos, aquella noche, la convencí para que se quedara un día mas, me había enamorado de ella o al menos la atracción que habíamos tenido fue muy fuerte como para que lo dejáramos pasar por alto, mientras preparaba todo para acompañarla de regreso a Japón y ayudarla a empezar una nueva vida nos besamos y supongo que no hay que ser muy inteligentes para saber el resto -se encogió de hombros- solo que no conté con que ella me daría una poción para dormir, cuando desperté ella ya no estaba, la busque por todo Japón pero no la encontré, pase años buscándola, volví a la villa y al templo, lo único que encontré fueron 3 hojas de cerezo en el lugar donde la vi luchando contra la muerte aquella vez, resignado el regreso a Londres fue inevitable y Hades procedió a borrar aquel recuerdo
El Malfoy suspiro finalizando aquella historia
-Lo siento -dijo observando a Saori- jamás supe que ella te había tenido -luego miro a Selene- no te culpo si me odias y quieres dejarme