Flourish & Blotts (MM B: 98551)

[Radamantys]

Radamantys sonrio al ver aparecer a su camarada Near, Rada agito la varita de manera Rapida en contra de Anne K. Haughton y susrro:

 

-Celerus Expelliarmus-

 

De inmediato la adrenalina se expandio en Radamantys y un rayo rojo se proyecto en pos de Anne K. Haughton si le daba su varita volaria a 5 metros de distancia de nueva cuenta Rada apunto a Anne K. Haughton y susurro:

 

-Sectusempra-

 

El rayo verde volo al pecho de Anne K. Haughton si le daba las heridas sangrantes apareceria, de nuevo Rada susrro:

 

-Fuego Negro-

 

Una bola de Fuego negro se elevo a 3 metros lista para ser lanzada o ganar poder.

[Near]

Radamantys se había apresurado a atacar, un movimiento rápido de su varita habia producido que un par de rayos salieran disparados de ella directamente hacia su victima. Luego pude ver como una gran esfera de fuego negro se elevaba casi hasta el techo del lugar para aumentar de tamaño a medida que pasaba el tiempo.

 

Mientras él utilizaba sus primeros ataques, yo ya había comenzado con los míos. Con mi mano libre en alto pronuncié:

 

- ¡Celerus fuego negro! - una especie de corriente eléctrica atravesó mi cuerpo, sabía que el poder del celerus había comenzado a acutar en mi, luego una bola de fuego negro se alzó sobre mi cabeza para posicionarse unos metros en el aire.

 

- ¡Fuego negro! - volví a pronunciar, haciendo que mi mano libre soltara una nueva bola de fuego hacia el aire, justo antes de que rada invocara su primer fuego negro.

 

sin mucho más para hacer, apunté hacia la fenixiana y pronuncié:

 

- Incarcerus - tres gruesas cuerdas salieron de mi varita para atarla con las manos en su espalda y sus piernas juntas, la ultima cuerda la amordazaría con fuerza para que no pudiera emitir sonido.

 

- pobre traidora a la sangre... - dije con desdén - te pudrirás en nurmengar como todos los de tu clase...

[Keaton Ravenclaw]

OFF: Aclarar que no sé por que no se la llevaron xD pero al ustedes no llevársela en el tiempo estipulado, me la llevo a San Mungo xDD

 

ON:

 

Tras haber sido curado por su nieta, el Ravenclaw se puso de pie poco a poco y viendo todo con cierto mareo, resultaba extraño, pues aun los confundus de hacía unos momentos le seguían afectando, aunque en claro, ya menos proporción. El pelirrojo volvió a mirar el cuerpo destazado de su elfo doméstico, y al final se resignó, de cualquier modo podía revivirle. Sin más, se disponía a hacerlo, extendió su mano derecha y pensó fuertemente en su varita de cerezo para invocarla, sin embargo, algo sucedió que hizo olvidársele la varita y voltear de lleno a la puerta de entrada.

 

Dos sendos mortífagos entraban al local, y a Kurt le parecía muy raro pues curiosamente uno de ellos llevaba ma misma máscara que la del mortífago que había entrado a atacarles hacía unos momentos atrás. Pero esta vez, no fueron contra Ayrton, sino contra Anne, Kurt no pudo hacer nada, pues al no contar aun con su varita, no pudo defenderla, por lo que sencillamente se doblegó y se puso a resguardo.

 

Una vez los mortífagos dejaron de atacar, Kurt vio su oportunidad, estiró de nueva cuenta su mano derecha e invocó su fiel varita de cerezo. Anne ya yacía muerta por no haberse curado a tiempo de sectusempra, así que sin más, el vampiro se acercó a ella y la tomó de un brazo y viendo a los mortífagos, les dijo:

 

—No se mi nieta, pero al menos yo, comparto sus ideales, este negocio es fiel a la Marca Tenebrosa —Dijo el Ravenclaw y desapareció del local en dirección a San Mungo.

[Anne Gaunt M.]

Andrea Perversius (xD)

 

La rubia caminaba por las calles del Callejón Diagon a buen ritmo, mirando las puertas de cada negocio en busca del que una buena amiga le había recomendado visitar. Se paró frente a algunas cafeterías, restaurantes, pubs, boticas... pero no encontraba lo que buscaba.

 

Finalmente alzó la mirada y asintió para sí misma cuando un rótulo en una puerta le indicó que había llegado a su destino: la librería Flourish & Blotts. Se acercó hasta la puerta y alzó la mano para agarrar el pomo de la misma y accionarlo. Nada más entrar, paseó la mirada por todos los volúmenes que allí ofertaban. Sin lugar a dudas, en aquel negocio encontraría lo que buscaba.

 

— ¿Hola? ¿Hay alguien? —preguntó, esperando a que el dueño o dueña de la tienda apareciese para atenderla. No tenía todo el día, necesitaba terminar rápido la compra para seguir con sus tareas.

[Keaton Ravenclaw]

Kurt se hallaba acomodando unos libros en las las estanterías de la parte de arriba, pues algunos habían sido llevado apenas poco, la verdad era que el Ravenclaw estaba pensando en modificar un poco el lugar y, en vez de ser solo una librería, adaptar Flourish & Blotts como una Cafetería-Librería, así, al comprar un libro, la gente se podría quedar a disfrutarlo allí mientras tomaba un café.

 

Sin embargo, el chico tuvo que salir de sus ensimismamientos a causa del sonido de la campanilla de entrada. <<Al fin, clientes>> Pensó el chico y terminó de acomodar los liubros que tenía en las manos, se sacudió un pcco el polvo que le había caído de la playera y bajó las escaleras.

 

—Hola, buenas tardes señorita —Saludó Kurt con una sonrisa en los labios —¿En qué puedo ayudarle? —Inquirió entonces el chico analizando a la mujer.

 

De algún lugar se le hacía conocida, pero con tanta gente que trataba el Ravenclaw en sus diversos lugares de trabajo, dudaba que supiera su nombre, por lo que sacó esa idea de su cabeza y se centró en lo que la mujer necesitaba.

[Anne Gaunt M.]

Andrea Perversius

 

La rubia no tuvo que esperar demasiado, pues casi al instante apareció un hombre quien, probablemente, era el dueño de la librería. La saludó y le preguntó si necesitaba ayuda, a lo que la Perversius respondió con una amplia sonrisa, a la vez que se cruzaba de brazos.

 

— Buenas tardes, señor —le contestó—. Pues llevo un tiempo intentando conseguir un libro sobre la legeremancia y la oclumancia, y una amiga me recomendó este lugar. Espero que pueda usted ayudarme y así hacer honor a las buenas palabras que he oído sobre su local —comentó, guiñándole un ojo.

 

Esperó a que el hombre le respondiese, a la vez que volvía a pasear la mirada por todos los libros que había en las estanterías con evidente interés.

[Keaton Ravenclaw]

Kurt se sorprendió antes las palabras de la chica. ¿En tan poco tiempo la librería había adquirido fama de nuevo? Era cierto que antes de que el Ravenclaw tomara posesión del lugar como propietario, la librería gozaba de una gran popularidad, pero después del fallecimiento del los señores Blotts perdió su brillantes.

 

—Pues vaya, me alaga que le hayan recomendado el lugar, espero poder proporcionarle lo que busca —Le dijo a la rubia y se volteó hacia la recepción mientras ella le indicaba lo que necesitaba —La Oclumancia es una parte fundamental de las Artes Oscuras, suelen ser libros difíciles de hallar —Le informó con voz clara —Sin embargo, en esta librería tenemos de todo, gracias a los permisos otorgados por el Ministerio —Añadió y comenzó a caminar entre las estanterías.

 

La parte de Artes Oscuras estaba en lo más profundo de la librería, pues eran ocultos de las miradas curiosas, y de hecho, solo el propietario y los elfos del negocio podían sacarlos de sus estanterías para que no fuesen robados y tomados por error. Al llegar ante la estantería correcta...

 

—Mire señorita, tenemos varios ejemplares sobre legeremancia y oclumancia —Comenzó el chico —"Los poderes de la Mente", "Los secretos del intelecto", "Legeremancia como arma. Oclumancia como protección" y "Las Artes Oscuras que no son tan Oscuras. Guía para el Oclumántico" Usted dirá los si los quiere ver antes de decidirse por uno —Dijo el chico sacando todos esos ejemplares de las estanterías.

[Anne Gaunt M.]

Andrea Perversius

 

La rubia sonrió al ver la expresión del hombre ante sus palabras. Era cierto que, antaño, aquella librería había gozado de gran popularidad y cariño por parte de sus clientes, pero en los últimos años había sufrido una grave crisis. Sin embargo, una amiga le había hablado del lugar hacía no demasiados días, asegurándole que el nuevo dueño ofrecía la misma cantidad y calidad que los antiguos, y lo afirmaba con tanta firmeza y emoción que la Perversius comenzó a pensar que el nuevo dueño del negocio era familia de la recomendadora (? xD).

 

— Sí, me hablaron muy bien de la librería desde su reapertura, y tenía que venir a comprobarlo —comentó, con una risita. No comentó nada ante las siguientes palabras del hombre, sino que se limitó a asentir. Le siguió hasta lo más profundo de la librería, dónde el dueño comenzó a nombrarle títulos, ofreciéndole un vistazo antes de decantarse por alguno de ellos.

 

— Oh, sí... estos dos parecen interesantes —dijo con emoción la rubia, tomando los dos últimos ejemplares nombrados. Comenzó a hojearlos con evidente interés hasta que, finalmente, tomó el primero de los dos—. Éste, creo que éste es justo lo que buscaba.

 

Se giró para volver a la parte delantera de la tienda, no sin antes seguir echando un vistazo a los distintos títulos que había en aquella parte de la librería.

[Keaton Ravenclaw]

Kurt se sintió bastante alagado con las palabras que la Perversius le decía. Que la librería fuera recomendada era un excelente eslogan de publicidad, además de claro, darle un toque de fama que nunca estaba de más. Así que Kurt se esmeró en tratar un poco mejor la chica, por lo que, sin que ella se diera cuenta, sacó la varita, la agitó y en la parte de arriba del local, apreció una cafetería que complementaba la librería.

 

—Además de la librería, contamos con una cafetería en la parte de arriba, por si desea quedarse a hojear el libro y ver si realmente es el que le interesa —Dijo el Ravenclaw mientras la mujer se decidía por dos de los libros que sostenía en las manos.

 

Al final, la chica se decidió por "Legeremancia como arma. Oclumancia como protección" cosa que alegro al pelirrojo, ese libro era uno muy bueno, lo que si era que salía un poco caro y necesitaba un formulario lleno de la chica haciéndose responsable de él.

 

 

—Muy buena elección, madame. El precio del libro es de 58 galeones y neceita un formulario especial al ser de Artes Oscuras —Le informó Ayrton llevándola a la parte delantera del lugar. Esperó la respuesta de la mujer...

[Anne Gaunt M.]

Andrea Perversius

 

La rubia escuchó las palabras del librero con atención. ¿Una cafetería arriba? Bien, lo tendría en cuenta, aquella librería le gustaba, y también el ambiente que se respiraba en ella. Miró al pelirrojo, parecía contento por la elección que ella había hecho, y esperaba que aquello no significase nada malo.

 

Cuando escuchó el precio, torció el gesto levemente. No le gustaba demasiado, eran demasiados galeones... pero necesitaba el libro, y no iba a andarse con tonterías. Asintió, tanto con ese dato como con el hecho de tener que rellenar un formulario.

 

— Claro, rellenaré lo que haga falta para obtener el libro... en realidad lo necesito, así que dígame qué he de hacer —le dijo, con una pequeña sonrisa en los labios, mientras le acompañaba a la parte delantera de la librería.