Jump to content

Librería "La Hermana Quisquillosa" (MM)


Xell Vladimir Potter Black
 Compartir

Publicaciones recomendadas

Desde la trastienda y ante las pocas ganas de seguir hablando de mi misma seguía con avidez la conversación que mantenía mi hija con el cliente que nos había interrumpido. Ahora entendía porqué se había atrevido a violar el toque de queda y lo lamente el silencio llevándome a los labios los dedos indice y corazón.

 

No pude evitar sonreír cuando escuché que lo denominaba "amigo especial" y pensar en que tenía un ángel por hija y no sacerdotisa común como podía serlo yo, lo que no me gustó demasiado fue cuando empezó a decir que hablaba con animales y volaba con dragones siempre que no estuviera yo cerca. ¡Me preocupaba por ella! y ella lo decía como si le hubiera prohibido comer dulces porque le fueran a salir caries. No pude mas y salté.

 

-¡Te he oído!

 

Tenía ganas de salir a explicarle al chico el por qué no la dejaba hacer esas cosas, pero no lo creí necesario yo era su madre y mis decisiones no se discuten, aunque debía recordarme siempre que ya era mayor y debía contar con sus opiniones, aunque estas no me gustasen un pelo.

 

Al final dejé de hacerles caso por si había avergonzado a Xell y me centré en el cuenco de agua mágica que había sobre la mesa y que yo había aparecido de la nada hacía un rato. Todavía quedaban misterios que resolver.

Sacerdotisa·Madre·Compañera


http://oi63.tinypic.com/9qy628.jpg


Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

La manera que intentaba Xell derribar lo que habia dicho antes, con fundamentos como que era un amigo especial o cosas parecidas me causaban bastante gracia y un porcentaje de molestia al escuchar la palabra "especial; eso sonaba a algun sindrome de deficiencia mental o algo asi, pero se la perdone solo llevando una sonrisa a medias a mi faz.

 

- Oh, ¿enserio vuelas dragones? - dije sorprendido. Jamas antes habia visto uno, y aun actualmente a ni uno solo. - y...¿Puedo ir contigo Xell? - bajé la voz un poco por si su madre oia lo que estabamos hablando, ya que por lo que ella decia, no le dejaba montarlos.- ¿es muy dificil?. Hace unas semanas atras vi un circo... seguramente es el mismo que hablas, pero no me atreví a entrar... Habia un hombre gigante; y estaba cerrado, je - saqué un poco mi lengua haciendo una mueca loca.

 

-Ok, no te como - rio- solo mordiditas suaves para sentir el sabor :3 (?

 

Off: da igual. Igual le hice cortito xd

Editado por Arthur K.

http://img571.imageshack.us/img571/2080/firma8r.png

http://i.imgur.com/smuhD5W.gif

*Sangre entre mis dientes*

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

-- ¿Quieres dejar a la muchacha en paz? -- le dije a mi sobrina Reena.

 

Y es que la conocía, amaba tanto a Xell que cualquier cosa era poco para ella. La protegía tanto que no quería verla cerca de mi circo por si algún animalejo la comía.

 

Bajé la voz.

 

-- Es más fácil que se muera en el entorno ese de gente con la que se mueve que no agredida por mis dulces animalitos -- le dije a Reena, en referencia al gusto que parecía sentir Xell por el Bando de la Orden del Fénix. -- Has de dejar que monte a los dragones. Le gusta. ¿Qué puede pasar, que se rompa una pata? Ya se hace un Episkey. Somos magos, sabemos usar la magia.

 

Le puse la mano encima de la suya, para darle algo de calor, y metí la mano en el cuenco aquel donde había aparecido el agua. Recordé todos los recovecos que quedaban en blanco. Tal vez no era el momento adecuado para seguir con ese tema. Lo retomaríamos en otro momento.

 

-- ¿Has visto que Heliké y Xell ya son unas mujercitas? Son independientes y casi no nos necesitan.

 

Y volví a mirarlas. A veces hay que dejar que las nuevas generaciones tomen el relevo de los que llevamos mucho tiempo. Ahora era momento de que las aventuras les pasaran a ellas.

 

-- ¿Sabes? A veces pienso que necesito un descanso. Tal vez... Irme del pueblo a ver mundo... Estoy segura que el sol luce en otras partes...

 

Suspiré, algo cansada...

XXBPo79.gifKRLtVZp.gif

jX4j1b2.png

  tOWLU4S.gif  KhGckEc.gif.6e9b2b71e2797bafac6806b66df1d1b0.gif     Icr0JPz.gif

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Iba a protestar, si, pero tan rápido como abrí la boca, la cerré. Tenía razón, salvo porque tampoco me fiaba de sus animales, no después de lo que había ocurrido con el basilisco. Me estremecí de solo recordar el miedo que había pasado aquella tarde.

 

-Tienes toda la razón, pero ¿qué mas puedo hacer? Ya le he dicho que no me gusta eso...

 

Se lo había dicho, había intentado explicarle, pero era joven y todavía no valoraba la vida, aun tenía que perder a algunos amigos, ver que no todo es color de rosa. Mi única esperanza era que cuando se casara, le entrase el mismo miedo que a mi, que empezase a mirar por su familia y se alejase de ese tumulto.

 

-Pues como no empiecen a necesitarnos las pondré de patitas en la calle a las dos, que yo tengo derecho a mimos y me tienen abandonada.

 

Heliké nunca había sido demasiado cariñosa, pero mi niña Xell si y era por eso que en algunas ocasiones me sentía tremendamente sola porque ella ya tenía una vida propia y a mi no me agradaba demasiado.

 

-¡Quieres que te deje la llave de la casa de Lydd?

 

Yo cuando no encontraba un lugar donde sentirme a gusto siempre me refugiaba allí. Era una casa recogida y tranquila, rodeada de muggles y naturaleza, para mi era un filtro de paz que me permitía desconectar de lo que me rodeaba sin llegar a asalvajarme como sin duda me ocurriría si me fuera a una cabaña incomunicada.

 

Ahora fui yo la que le cogió la mano a ella, se la veía cansada y seguro que ella misma se daba cuenta de que ya no era la misma chispa brillante que hacía unas semanas. Esperaba que mi escondite la ayudase, aunque siempre la podía mandar con la Chaman que me había cuidado cuando había sido atacada en la India.

Sacerdotisa·Madre·Compañera


http://oi63.tinypic.com/9qy628.jpg


Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

¡Demonios! ¡Había olvidado que mi madre y mi tía estaban allá, cerca, espiándonos!

 

- ¡Mamá! - protesté. ¿Cómo es que me oía? ¿Sería que hablaba demasiado alto o sería que estaba oído avizor de lo que sucedía en la entrada de la biblioteca.

 

Bajé la voz y me incliné un poco hacia mi amigo.

 

- A mami le aterrorizan los animales del Circo de la tía Sagitas. Si por ella fuera, no saldría de casa, donde nuestra Quimera me mantendría a ralla para que no me escapara.

 

Ahora elevé la voz para que mis familiares me oyeran.

 

- Pero en el circo trabajo con los Micropuffs, que son criaturas deliciosas y nada peligrosas.

 

Me puse a reír y tuve que ponerme la mano en la boca para que no lo notaran. Después recuperé mi tono normal y volví a hablar con él, respondiéndole.

 

- Sí, vuelo con la madre dragona. El bebé es demasiado pequeño para cargar aún conmigo, aunque ya es casi tan alto como yo. Pero está creciendo mucho. Juego con él para fortalecer sus alas. Pronto podremos hacer alguna excursión al Bosque Prohibido.

 

¿Habrían oído eso? Más que Reena, me preocupaba que lo sintiera Sagitas, que ella no me dejaba sacar tan lejos a los animales.

 

- ¿Viste el Circo cerrado? Sería el día de descanso semanal. Ese día no hay funciones y el staff lo usa para comprobar las medidas de seguridad en el lugar, para que no haya accidentes.

 

El tema de las criaturas me gustaba mucho; si pudiera, llenaría la mansión de animales, aunque mi madre pusiera el grito en el cielo. Incluso me había intentado comprar un Aethonat, pero en la tienda habían dicho que se les había acabado.

 

- Si quieres, yo te invito al Circo y te enseñaré todos los animales que tiene. Creo que sin ser la Reserva Mágica, es el negocio con más animales salvajes reunidos en el pueblo. Creo que tenía 28 ejemplares de animales peligroso. Espero que te animes. Pero nada de mordiscos.

 

Y me puse a reír, muy contenta con nuestra charla.

image.png

 NiqQIUZ.gifidFgtQA.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

En el tiempo en el que Xell y su amigo estaban charlando animadamente, poco a poco me fui desplazando para dejarlos a “solas” ya que creía que una conversación tan privada no debería de ser molestada por tonterías.

 

Así que investigué más o menos por las estanterías a ver si conseguía encontrar el dichoso libro al que había ido a comprar y que no lo daba encontrado por ningún lado. A pesar de hablar poco con el chico, me había caído bastante bien, a pesar de que me decía que era semiinferi cosa que no le creí en su momento, me había sorprendido bastante, ya que los inferis eran cadáveres encantados por magos tenebrosos como había aprendido en su momento en clases de Defensa Contra las Artes Oscuras así que era poco probable, lo que me llegaba más era su olor a esencia, esencia demoníaca y esperaba que no tomase el camino de la vía oscura. Sería algo bastante desagradable tener que luchar con él, ya que me había parecido encantador. Lo de siempre primeras impresiones.

 

Mientras seguía rebuscando por el maldito volumen que necesitaba podía escuchar algunas frases graciosas que había hecho que sonriera un poco, si Xell podía montar en un dragón ¿porqué yo no? Además tenía un Aethonan así que no sería tan diferente.

 

Cuando me harté de buscar, me dirigí hasta mi prima:

 

-disculpa Xell, estoy buscando un libro de astronomía, me da igual tanto muggle como mágico, o los dos si tienes mejor. Pero es que no le encuentro y me dices el precio, es un atlas astronómico –le aclaré, y mientras tanto esperaba que con mi interrupción el joven no se asustase por tener tanta familiaridad con ella, pero éramos familia así que no creo que le importase mucho.

 

HdDMuO2.png

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

"Nada de mordiscos". ¿Habia escuchado bien? Rei al instante al escuchar eso ultimo. Respondiendole de manera positiva. La verdad, con eso que habia dicho de montar dragones por el bosque me llamo mucho la atencion y wow, ya me imagnaba volando por esos lugares en dragones escupe fuego; porque escupian fuego supongo ¿o no? De eso me surgio una duda.

 

-Hey, pero...¿no es peligros...- Me callé al instante. Parecia que estaba actuando al igual que su mama, y eso no le gustaria para nada de seguro a Xell, asique al instante cambie la frase: Entonces...¿Volaremos juntos?¿Tu invitas? -exclamé como excitado energicamente con sus cronicas. - Ok, entonces cuándo me paso por el Circo? ¿o tu me llevaras?¿iremos juntos? -Entrecierro los ojos razonando en mis pensamientos- Creo que seria mas seguro que vayamos juntos, asi no me pierdo y me haces movidas para entrar gratis -Bromee. - Jaja y no ñ ñ, nada de mordidas -terminé la frase con una sonrisa.

Editado por Arthur K.

http://img571.imageshack.us/img571/2080/firma8r.png

http://i.imgur.com/smuhD5W.gif

*Sangre entre mis dientes*

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

¡Qué agradable era aquel muchacho! A pesar de ser un "zombie" era muy positivo, me caía muy bien, y su risa era muy contagiosa. Seguí riendo a su lado, sintiéndome a gusto, a pesar de que mi tía y mi madre estaban allá detrás, medio cotilleando lo que decíamos. Heliké también estaba allá, pero había sido tan discreta que se había alejado de nosotros para darnos cierta "intimidad", si eso fuera posible en un local como la librería.

 

Por un instante, Arthur me pareció casi como mi madre pero en voz masculina. Eso me hizo reír un poco más, pero enseguida recobré la compostura, para que no pensara que me burlaba de él.

 

- Todos los animales son peligrosos si les tienes miedo. ¡Pero éstos te encantarán! ¿De verdad quieres volar conmigo? ¡Es genial! - me había exaltado y había elevado la voz, pero después la bajé; Sagitas estaba cerca, tal vez no le gustara que dijera que sus animales no eran peligrosos. El Circo vivía de que todos pensaran que eran criaturas horribles y salvajes.

 

Bajé la voz y me acerqué a él, casi juntando las cabezas. Así Sagitas no oiría (¿seguro? Era capaz de tener micrófonos ocultos, siempre se enteraba de todo.

 

- Pues vamos juntos. Podemos quedar en el camino del Estadio. Y desde allá vamos juntos. En la entrada nos dejarán entrar sin problemas si vienes conmigo. Y sino, te enseñaría un lugar por donde colarte, pero de eso no se puede enterar mi tía o me empapela. ¡Será genial!

 

Sentí pasos y me alejé. Era Heliké, no quería que sospechara que tramábamos una aventurilla con los dragones.

 

- ¿De Astronomía? ¡Tengo muchos! ¡Ven!

 

Me disculpé con Arthur por tener que dejarle con u guiño divertido que le recordara nuestro plan, pero debía vender libros. Era mi trabajo.

 

- Aquí hay libros de astronomía, en esta pila... ¿Un Atlas Astronómico? ¿Te refieres a ésto?

 

Y con la varita hice que bajara un enooooorme libro de tapas marrón oscuro, casi color café.

 

- No es caro, te lo dejo a precio de familia, no tendrás que empeñar nada para comprarlo, prima.

image.png

 NiqQIUZ.gifidFgtQA.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Después de disculparse con el joven al que había conocido unos momentos antes, mi prima enseguida vino en mi ayuda a buscar el libro que quería comprar y me llevó a una sección en la que había bastantes sobre el tema y me maldecía a mi misma por no haberme fijado antes.

 

Pero por lo poco que pude escuchar de su conversación seguro que la joven planeaba algo con el chico, no temía por su seguridad ya que era una joven bastante diestra con la magia y se podía defender ella sola. Pero cómo era de mi familia era mi deber protegerla. Pero seguramente tenían planeado hacer alguna visita a uno de los negocios de mi tía y sonreí internamente. No decidí hacer ningún comentario pero en cambio el libro que me enseñó era enorme:

 

-carai, sí que es grande sí –el libro era de tapas marrones con una galaxia en la portada en miniatura y tan mágico que era que se mostraba en movimiento:

 

-Sí, éste puede servir –respondí con amabilidad y comentaba algo del precio, no pude evitar soltar una carcajada – no te preocupes prima, no me hace falta vender nada. Además está la tía para dejarme algo ¿no te parece? –Volví a reírme animadamente – este tomo parece bastante interesante así que me lo llevo, ¿me lo puedes envolver? Y no, no es para regalo –le aclaré antes de que me dijese nada.

 

-Dime cuánto cuesta y lo saco de mi monedero de piel de moke o sino voy al banco que está aquí cerca y saco más galeones –terminé de hablar mientras esperaba que me diese la información, si realmente me gustaba volvería a ese lugar para comprar más libros y no sólo de astronomía, si no de cualquier otra temática. La librería parecía muy interesante.

 

HdDMuO2.png

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Estaba halagada porque a Heliké le gustara el libro que había escogido para ella. Me hizo gracia que dijera eso de Sagitas. Ella era una protestona, sí, pero dejaba el dinero sin chistar, sin pedir explicaciones. Nunca habría problema de liquidez estando la tía cerca de nosotras.

 

- Claro que te lo envuelvo, Heliké. ¿Para regalo o es para ti? Tengo este papel autorellenable. Pongo el libro encima y... ¡voilà!

 

El papel se plegó sobre sí mismo y se puso alrededor del libro. Hasta hizo un pequeño lazo alrededor del papel dorado.

 

- Para regalo es muy bonito, y si es para ti, creo que tú también te lo mereces, así, bonito, ¿verdad? ¡Oh, no es para regalo!

 

Tan afanada había estado con el envoltorio que no le había oído esto último. Me encogí ligeramente de hombros.

 

- Bueno, no pasa nada, ha quedado precioso.

 

Tomé la varita y pasé la punta por la caja registradora.

 

- Son 125 galeones menos el descuento por familia... 1 galeón 25 sickles.

 

Sonreí; esperaba que no lo encontrara caro.

image.png

 NiqQIUZ.gifidFgtQA.gif

 

Enlace al comentario
Compartir en otros sitios web

Unirse a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte más tarde. Si tienes una cuenta, conecta ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a esta discusión...

×   Pegar como texto enriquecido.   Pegar como texto sin formato

  Sólo se permiten 75 emoji.

×   Tu enlace se ha incrustado automáticamente..   Mostrar como un enlace en su lugar

×   Se ha restaurado el contenido anterior.   Limpiar editor

×   No se pueden pegar imágenes directamente. Carga o inserta imágenes desde la URL.

Cargando...
 Compartir

Sobre nosotros:

Harrylatino.org es una comunidad de fans del mundo mágico creado por JK Rowling, amantes de la fantasía y del rol. Nuestros inicios se remontan al año 2001 y nuestros más de 40.000 usuarios pertenecen a todos los países de habla hispana.

Nos gustan los mundos de fantasía y somos apasionados del rol, por lo que, si alguna vez quisiste vivir y sentirte como un mago, éste es tu lugar.

¡Vive la Magia!

×
×
  • Crear nuevo...

Información importante

We have placed cookies on your device to help make this website better. You can adjust your cookie settings, otherwise we'll assume you're okay to continue. Al continuar navegando aceptas nuestros Términos de uso, Normas y Política de privacidad.