Sala Común de Hufflepuff

[Adrian Wild]

 

La sala común de Hufflepuff se encuentra en los sótanos, cerca del acceso a las cocinas. En el sótano donde se puede ver el cuadro del bodegón que esconde la entrada a las cocinas, hay un rincón, a la derecha, lleno de barriles apilados. Aparentemente, sería imposible que ahí hubiera cualquier tipo de entrada, pero quien conoce el secreto sabe que, si se golpea al segundo barril de la parte inferior, en el medio de la segunda fila, al ritmo de "Helga Hufflepuff", la tapa del barril se abre y deja un hueco por el que puedes entrar a gatas para llegar al espacio reservado de los tejones. Sin embargo, si se golpea el barril incorrecto o se hace en un ritmo equivocado, los barriles empapan al intruso en vinagre y le prohíben el acceso.

Una vez se logra golpear el barril con el ritmo acertado y entrar en la sala, lo que más llama la atención es la agradable sensación acogedora y de comodidad. La sala común de Hufflepuff es conocida como "la más cómoda y acogedora de todas". Todo en ella es circular y hay numerosos detalles en las paredes creando estas formas, como tapas de barriles, cuadros, macetas colgadas por todas las paredes, del techo y apoyadas en mesas, sillas o el suelo. Los colores que destacan son el amarillo, el negro y los ocres. En lo alto, numerosas ventanas de madera circulares y ovaladas filtran una cálida luz que procede de los jardines, y se pueden ver a través de ellas hierbas y dientes de león ondeantes. Cómodos sillones, sofás, sillas y cojines abundan por toda la sala, sobre todo en la zona alrededor de la pequeña chimenea de hueco redondo. Hay mesas cubiertas de plantas de todos tipos y otras con espacio para poder estudiar o realizar otras actividades.

Se dice que, al estar ubicada bajo tierra, es la sala común más segura y cómoda de todas porque es la sala que más reduce los efectos adversos climatológicos. La temperatura siempre es ideal y su decoración tan terrenal y verde debido al fomento intrínseco de la Herbología por parte de muchos Hufflepuff son favorecedoras de ese ambiente tan agradable. En uno de los laterales, una pequeña puerta redonda da acceso a las habitaciones, que se disponen a lo largo de un entramado de pasillos cavados en la tierra, y son igualmente circulares. Al igual que en las demás casas, estas están divididas por cursos y géneros.

La sala común es un buen espacio para poder descansar y estudiar cómodamente, charlar con los compañeros y compañeras de casa, pasar agradables y sencillas veladas y compartir toda clase de momentos únicos. En general, toda la sala da una inexplicable sensación de tranquilidad y compañerismo. Un compañerismo que se refleja en el trabajo y las actividades honestas de esta madriguera.

Editado 31 Agosto por Adrian Wild