→~*Mansión Delacour*~←

[Kamra Ashryver D.]

 

La noche había caído. La luna llena estaba en lo alto del cielo inglés, alumbrandolo todo con su luz plateada. Kamra caminaba a paso firme fuera de los límites de la Mansión Delacour, y mil pensamientos se agolpaban en su mente. Como el que seguramente su hermana loba Lisa Weasley Delacour le tomaría del cabello para zarandearla de aquí a allá por su osadía en vandalizar su casa. Claro que no sabría que había sido ella junto con sus mortifagos, pero aquella idea persistía, dejándola entre la risa y la histeria. 

Se detuvo a medio metro de distancia de la entrada, que no estaba delimitada por ninguna verja o algo de ese estilo, salvo por arbustos bien cuidados y un jardín que se extendía hasta la Mansión propiamente dicha. La niebla era densa al raz del suelo y brillaba por la luz de la luna. Kamra admiró la gran construcción de estilo neorenacentista, con sus paredes palidas brillantes e imponentes y la fuente de agua estaba funcional, largando chorros de agua hacia arriba bonito de ver. 

El cabello de la peliblanca estaba oculto bajo una peluca colorada con trenzas, la careta que cubría su rostro emulaba la de la muñeca Annabelle de una película muggle que había visto en el cine, por insistencia de uno de sus hijos. Todos los que llegaran deberían estar disfrazados como ella. Kamra miró su vestido hecho girones y desprolijo que iba a juego con su disfraz. Suspiró. Se veía ridícula, pero al menos nadie la reconocería. 

Alzó la vista al cielo, esperando a aquellos que sabría que vendrían pero de todos modos levantó la varita hasta detrás de su oreja derecha y presionó con ella la marca Tenebrosa, haciendo el llamamiento a sus congéneres. 

Sería divertido, pensó sonriendo bajo la careta. Dejarían la Mansión Delacour como una gran feria de decoración Halloweenezca. No podía esperar.

 

Kamra Ashryver D.— Annabelle— Mago oscuro nivel 8 - Comandante.

Leslie Ann Linmer PB —  Jason Voorhees  —  Tempestad  nivel 46

Eliah Selwyn R.  — la cazadora coneja del Dead by Daylight —Tempestad  nivel 7

Lukyan A. Volkov — Satoru Gojo —Base Nivel nivel 56

Jeremy Triviani - Jocker Base nivel 51 

Cillian Haughton — Pepa Pigg demoníaca — Líder  nivel 54 

 

 

[Eliah Selwyn R.]

Otro día más que se iban a pasear con sus trajes de Halloween, había elegido el de la otra vez, volvería a ser la cazadora con mascara de conejo con los ojos totalmente negros, un delantal manchado de sangre, un pantalón desgastado con parches en las rodillas, una camisa blanca ensangrentada además de ser más alta de lo que era y el cabello largo negro, por tanto, la poción multijugos había vuelto a funcionar de forma exitosa. Y esta vez la mansión elegida había sido la Delacour para empezar a repartir regalitos de Halloween.

—This is Halloween, this is Halloween…—tarareó con una voz maquiavélica que no era la suya propia, mientras miraba lo poco que se veía la luna por culpa de una densa niebla a ras del suelo que reinaba el lugar. Había vuelto a ver a Jasoon, su compañero del día anterior que estaba por allí rondando en los limites de la mansión, además de un Joker o una peppa pig que daba bastante terror o a Satoru gojo.

Llegó de nuevo caminando entre aquella niebla mientras arrastraba bolsa llena de sangre que llevaba ciertos regalitos y que era parte de su disfraz. Observó a sus amigos estaban afuera de los límites de la mansión mientras tarareaba una cancioncita típica de su personaje que ponía los pelos de punta a cualquiera que la escuchará de cerca. Ladeo levemente la cabeza de forma psicópata mientras miraba a Anabelle que parecía ser la cabecilla de aquel juego macabro y la que había llamado a todos ellos puesto que la marca tenebrosa la había empezado a quemar y a escocer en su espalda hasta bajar hasta la entrada de su biceps.

—Es hora de la caza…—Susurró con aquella voz macabra de su disfraz sedienta de sangre o mas bien de jugar, era como si el propio disfraz la poseyera para tomando la personalidad de la asesina. Mientras hacia aparecer su varita en la mano derecha para empezar a jugar en cuanto les dieran permiso para hacerlo.

[Jeremy Triviani]

Jeremy apareció en los límites de la mansión Delacour, su figura emergiendo de entre las sombras bajo la luz de la luna llena con una densa niebla que opacaba la visión lejana. No los verían llegar.  Vestía un elaborado disfraz del Joker: traje púrpura, chaleco verde, y la icónica sonrisa roja pintada sobre su rostro cubriendo su identidad. La brisa nocturna hacía crujir las ramas a su alrededor, pero él no prestaba atención, sus ojos azules centelleaban bajo el maquillaje, llenos de ansias de sangre.

El plan era simple: entrar, decorar, y desaparecer en la oscuridad. El disfraz era solo parte del juego, una broma cruel para aquellos que pronto conocerían su verdadero rostro. La mansión se alzaba frente a él, majestuosa y tranquila, ignorante del caos que estaba a punto de desatarse frente a ellos. Ansiaba encontrar fenixianos envueltos en auras defensivas.

Jeremy inhaló profundamente, saboreando la sensación que siempre lo embargaba antes de la maldad. Sus dedos se tensaron alrededor de su varita oculta, y una sonrisa, más peligrosa que la pintura en su rostro, se dibujó bajo la máscara.

-Let’s put a smile on their faces... -Susurró observando a sus compañeros de marcha en sus divertidos disfraces. 

 

[Cillian Haughton]

La hora había llegado, una vez más se reuniría con los suyos para hacer un par de maldades a lo largo y ancho de Londres. Aunque bueno, eso era el plan general, esta noche centrarían su atención en la mansión de la.... ¿Honorable familia Delacour? No sabía con exactitud si podía llamarla de esa forma. Para la ocasión, el rubio eligió un disfraz diferente al que utilizo para la visita a la Mansión Granger. Esta vez eligió disfrazarse como la versión demoniaca de una icónica caricatura infantil.

Así que en esta ocasión vestía un traje de cuerpo completo, el cual era de un material rosado pero desgarrado y envejecido en ciertas partes, lo cual daba un aspecto de que el cuerpo del personaje estuviera quemado. El traje también tenía un par de detalles en negro y gris oscuro que simulaban cicatrices que recorrían sus brazos y piernas. Para ocultar su rostro, había optado por una máscara de cabeza redonda y rosada con cuernos retorcidos que resaltan en la parte superior y a su vez, la mascara tendría un sistema de ojos rojos brillantes los cuales funcionaban con ayuda de un poco de magia. La sonrisa del personaje ya no era más de felicidad si no que se encontraba alterada con dientes afilados y retorcidos como si estuviera lista para morder, finalizaba su disfraz con un par de botas que imitaban las pezuñas de un cerdo pero con detalles en negro que le daban un aspecto infernal.

Sí, Cillian estaba disfrazada de una versión demoniaca de Peppa Pig.

En el momento en que se presentó fuera de los limites de la Mansión Delacour, la noche estaba ya en su punto máximo. Esa noche no llovía, la luna podía observarse en todo su esplendor en el cielo pero al ras del suelo había ya bastante niebla, lo cual le daba la noche un toque bastante siniestro el cual venía perfecto para la ocasión. Al estar frente a la Mansión, Cillian comenzó a caminar hacia donde la Mansión se encontraba situada. La hora de divertirse había llegado.

— Oh, Peppa Pig, Peppa Pig ¡Y este es mi hermano George!Es Peppa Pig, es Peppa Pig ¡Y aquí esta Mamá Pig! Peppa Pig, Peppa Pig ¡Y él es Papá Pig! Ella es Peppa Pig, es Peppa Pig ¡Yo soy Peppa Pig —entonaba a cada paso que daba.

[Leslie Ann Linmer PB]

 

Leslie termino de acomodarse nuevamente su disfraz, esta vez conocía bien el lugar del ataque así que estaba emocionada de realizar aquella visita con sus hermanos mortifagos, tarareaba feliz con la mascara de Jason puesta pues hace mucho tiempo se habia hecho con el poder de varios cabellos de asesinos y entre ellos los de Jason eran los que mas abundaban por lo que podía usarlos varias veces al día con la poción multijugo y su metamorfomagia. 

Le habia ordenado a los elfos a dejar abierta la puerta de entrada, aunque estaban confundidos no podían decir nada, desapareciendo de su cuarto apareció en el jardín, la fuente tenia agua cristalina, su césped estaba cortado muy prolijo, la mansión brillaba resplandeciente bajo las estrellas de aquella noche de de luna llena, apesar de que la niebla abundaba entre el bosque que rodeaba el lugar no le quitaba la gloria intacta que posea aquel lugar, incluso si se quedaba sin miembros parecia que no caería ante nada lo cual le daba orgullo y a la vez parecia retarla a destrozarla y ver la desesperación de sus integrantes al saber que ya no poseían un lugar donde volver.

Leslie se acerco al borde del bosque con su varita en la mano derecha y el machete en su izquierda a esperar a sus compañeros ingresaran directo, después de todo aparte de ella ya nadie recordaba aquella familia fantasma. 

 

 

[Lukyan A. Volkov]

La noche era oscura y silenciosa, solo interrumpida por el susurro del viento que se deslizaba entre los árboles. Lukyan, disfrazado de un payaso aterrador, se encontraba a las afueras de la mansión Delacour. Su maquillaje blanco contrastaba con la oscura vestimenta a rayas, que se movía inquietantemente con cada paso que daba. La sonrisa pintada en su rostro, amplia y grotesca, parecía cobrar vida propia bajo la tenue luz de la luna llena. Se había transformado de manera impecable: su piel era pálida, como la de un muerto, y su cabello negro se alzaba en puntas desiguales, dándole un aire aún más siniestro. La risa maníaca que se escapaba de sus labios resonaba en la oscuridad, una burla a la calma que rodeaba la mansión.

A medida que se acercaba a la barda que rodeaba los terrenos, observó la intrincada vegetación que crecía por doquier. Las sombras de los árboles se alargaban, proyectando formas siniestras en el césped recién cortado acompañado de una neblina densa al ras del suelo. Su mente recordaba las historias que circulaban sobre la mansión y sus misterios, lo que solo aumentaba su emoción. Su risa se hizo más fuerte a medida que se acercaba a el jardín, imaginando las reacciones de quienes pudieran cruzarse en su camino. La combinación de su disfraz y la atmósfera tenebrosa lo hacían sentir poderoso, como un maestro de ceremonias de un espectáculo oscuro. Estaba allí para recordarles a todos que, a veces, lo que parece divertido puede ocultar un terror profundo.

Con cada paso, la emoción lo consumía.  En ese momento, se sintió como el rey de un mundo de sombras, listo para desatar su locura en una noche que prometía ser inolvidable.

 

[Kamra Ashryver D.]

Kamra miró a cada uno de los hombres y mujeres que llegaron a su lado. Jason, una coneja, dos payasos raros y ¿Peppa Pigg? Se contuvo de reír mientras apuntaba hacia la Mansión con su mano derecha, la varita en mano - ¿Se ve aburrida no? Hagamos que cobre vida - la sonrisa de Kamra era amplia bajo la careta de Annabelle y sin decir más avanzó entrando a los terrenos. 

Sabía que Leslie estaba allí vestida de Jason y se acercó a ellaz rozandola con el hombro mientras llegando a los arbustos de frente a la Mansión, agitaba la varita y murmuraba - Morphos - el grupo de 4 arbustos más cercanos se unieron para formar una calavera grande, de su boca salían insectos y sangre, mientras caminaba frente a las puertas de la Mansión manchandolo todo.

Hizo que cada pulgada de los demás arbustos estuviera llena de telarañas pegajosas, y con corrió hacia la fuente, dejando caer tinte rojo que teñiría por completo el agua. Volviéndola sangrienta. 

- Vitae - dijo apuntando su varita a otro arbusto, que se convirtió en una peluda rata de su mismo tamaño. 

- ¡Pónganse creativos! - dijo con la voz distorsionada. Esperaba dejar aquella Mansión viéndose como un lugar embrujado. 

 

Ada Camille Dumbledore - nivel 43 - Mago Oscuro La niña Del aro.

 

[Ada Camille Dumbledore]

La noche estaba tormentosa la lluvia y la luna llena estaban sobre nosotros caminábamos por las inmediaciones de Ottery cuando el llamado Delacour llegó, el cabello largo sueño mojado, mi bata chorreando agua y mis pies descalzos dejando huellas húmedas sobre el camino avanzaba rápido ayudándome con mis manos para llegar al bosque en los límites de los jardines de la mansión Delacour.

Allí los personajes oscuros estaban esperando para incursionar en la mansión de manera temida la niebla densa que casi nos cubría no nos dejaba ver mucho los unos a los otros pero sabíamos Quiénes éramos la cita estaba dada y también los objetivos que íbamos a realizar en esa casa. Era momento de entrar y de momento de hacer todo más dulce a nuestros ojos.

Era momento de empezar a traer la oscuridad a este lugar, que todo empezará a ver de cómo debía ser, tenebroso para nosotros. El sentimiento de oscuridad que me invadía me en lo que claro quería emanar todo eso de mi

 

 

[Cillian Haughton]

Al encontrarse dentro de los límites de la Mansión Delacour había llegado la hora de divertirse, el rubio no tenía intención de entrar. Por lo menos no si no era necesario. Así que se dirigió hasta situarse justo frente a la fuente que se encontraba en medio del jardín. ¿Sería bueno llamar un dragón una vez más? Sí, sería bueno. Nunca era meter a un dragón en cualquier situación así que mientras se decidía que tipo de dragón invocaría en esta ocasión, lo primero que hizo fue Invocar Katana y en su mano derecha se materializo una katana de aspecto sangriento que le ayudaría a complementar su disfraz una vez más.

Cuando ya lo tenía decidido, no había vuelta atrás. Una vez más invocaría a su dragón para que este protegiera tanto a él como a los suyos si era necesario.

— Corpus Patronus —murmuró y al instante un patronus en forma de un Dragón Galés Verde Común se materializo sobre los jardines de la Mansión Delacour, esperando para lo que fuera necesario, ya fuera defender o atacar.

Así que mientras Cillian esperaba a que sus compañeros hicieran de las suyas y apreciaba la variedad de disfraces que habían elegido para esta ocasión, el por su parte con ayuda de su varita logró que una divertida imagen se hiciera un lugar justo sobre la puerta de entrada, esto como recordatorio de que habían estado ahí. Y al tiempo pudo observar como uno de los suyos cambio el color del agua de la fuente a rojo.

 

 

[Eliah Selwyn R.]

Comenzó a andar por el camino con la bolsa arrastrando mientras miraba que junto al camino había unos pequeños arbustos o mini arboles que adornaban aquella travesía hasta la puerta, además en el medio había un tipo de fuente. Así que lo primero  que hizo tras llegar enfrente de la fuente fue dejar la bolsa para tirar su contenido en el suelo dejando ver un grupo de calaveras que se desparramaron juntas en los pies de la asesina cazadora coneja. 

—Vitae—Pronunció con aquella espeluznante voz mientras apuntaba a aquel grupo de calaveras que había llevado en aquella bolsa y estas se unieron  mientras la salían manos y piernas, además de dientes y ojos que la protegerían o la ayudarían mientras  corría alrededor suya a como mucho un metro de distancia de ella.

—Morphos—dijo con su voz macabra mientras apuntaba a uno de los arbustos que estaban decorando aquel camino de la entrada para transfórmalo en un lobo que obedecería cualquier de sus ordenes al igual que el Vitae que había preparado.

Caminó hasta las escaleras mientras el lobo que había formado la seguí al igual que el montón de calaveras del vitae mientras dejaba caer algunas chuches de sus bolsillos sangrientos para que vieran que habían traído algunos regalos para los que habitaban la mansión. Mientras tanto pudo ver a un dragón gales que había invocado la peppa pig mientras de la fuente salía sangre en vez de agua. Ahora la tocaba a ella decorar así que dejo un cartel arriba de la puerta en la fachada para que supieran que estaban ahí. Y seguía tarareando aquella horrible canción del personaje que había elegido.